El Año Nuevo y sus celebraciones en el mundo

Con música, fuegos artificiales, brindando o incluso orando son algunas de las formas de celebrar la entrada en el Año Nuevo, que este año, encima estrenamos década.

Por eso, no es de extrañar que existan tantas tradiciones como países hay en el mundo.

Y dependiendo del calendario por el que se rija cada país, éste lo celebra en una época u otra del año. Sin embargo, una cosa está clara y es que en todos los lados el Año Nuevo es toda una celebración.

Las islas del Pacífico fueron las primeras en recibir el 2020, y uno a uno fueron sucediéndose los países que dieron la bienvenida al Año Nuevo y nosotros fuimos testigo de ello.

¿Quién no ha visto alguna vez imágenes de los espectáculos de fuegos artificiales sobre la bahía del puerto de Sídney?, ¿Quién no se ha querido teletransportar al buen clima de Brasil para bañarse vestido de blanco y saltar las olas para atraer la buena suerte? O, ¿por qué no, chapotear bajo la lluvia de confeti que inunda Times Square? Y ¿qué me decís de apostar por lo espiritual y celebrar el Año Nuevo como los budistas mediante la oración, el incienso y el tañido de las campanas para alejar los pecados terrenales?

Tradiciones asombrosas e impresionantes donde las haya, pero quizás una de las costumbres más curiosas y que nosotros tenemos más que interiorizada, es la de comer 12 uvas antes de recibir el Año Nuevo.

Ya puedes pasar el fin de Año en otro país, a cientos de kilómetros, o incluso que sea otra estación que es raro que un español que no se lleve consigo esta tradición. No vaya a ser, que encima este año tengamos mala suerte por ello.

Otras tradiciones curiosas

Otra de las cosas que me llaman mucho la atención son los propósitos de Año Nuevo: hacer más ejercicio, dejar de fumar, comer saludable, adquirir un nuevo hobby, cambiar aspectos de nuestra personalidad que no nos gustan… y así un sinfín de retos o propósitos, que vamos readaptando año tras año. ¿Para qué tanto propósito si cuando ha pasado un mes decidimos dejarlos?¿No sería mejor pensar en presente y dejarnos de tanto futuro?

Y por otro lado, ¿qué os parece que la celebración del Año Nuevo sea en enero y no en el mes de la vuelta al cole?. No sé si será porque sigo anclada en el pasado o qué, pero a mí creo que me gusta más en septiembre. Y, ¿ a vosotros?